El Desarrollo del Carácter (parte 3)
Esta es la parte 3 de 3 de nuestra serie sobre el desarrollo del carácter. Usted puede leer la parte 1 aquí y la parte 2 aquí.
De todos los factores que contribuyen al desarrollo del carácter, la construcción de la seguridad emocional es uno de los más importantes. La ciencia es clara en que las conexiones emocionales que los niños forman en sus primeros años de vida establecen la base de gran parte del crecimiento, el aprendizaje y el desarrollo espiritual en los años siguientes.
Los seres humanos fueron creados para relacionarse. Leemos que en el jardín del Edén el Señor visitó a Adán y Eva y caminó con ellos. El propósito de Dios, desde el principio de la creación, era estar en comunión y en estrecha conexión con aquellos que fueron creados a su imagen.
Tristemente, el pecado rompió esa conexión. Sin embargo, a pesar de esta ruptura, el propósito de Dios constantemente ha sido estar lo más cerca posible de sus hijos durante los últimos 6.000 años, a pesar de estar perdidos y en pecado. Dios sabe que seremos más felices en una relación estrecha y amorosa con Él y entre nosotros, porque para eso fuimos creados. Nuestras vidas no serán realmente plenas sin relaciones amorosas.
La verdadera educación está motivada por la relación, y busca restaurar la relación del ser humano con lo divino. Los padres tienen la hermosa oportunidad de ser el modelo de la relación estrecha y amorosa que Dios desea con cada uno de sus hijos, desarrollando una relación fuerte y amorosa con sus hijos, desde la infancia. Esto es vital para el trabajo de desarrollo del carácter.
La fuerza moral como resultado de la relación
Las investigaciones son claras en cuanto a que una relación fuerte y amorosa, especialmente entre madre e hijo, es uno de los factores más significantes en el desarrollo de la seguridad emocional. Un estudio publicado en Child Development. [1] examinó el efecto de la relación entre madre e hijo y la seguridad emocional en el desarrollo moral de los niños, con varias conclusiones importantes.
1. Relación y Desarrollo de la Conciencia
«En el desarrollo de la conciencia temprana, las primeras relaciones del niño dentro de la familia son especialmente importantes…» [1]
«La conciencia», de la que se habla aquí, tiene que ver con el conocimiento del niño sobre el bien y el mal, y también tiene que ver sobre si el niño se sentirá mal si ha hecho algo incorrecto o si podrá seguir adelante sin ningún sentimiento de maldad. Una conciencia tierna es algo que todo padre cristiano seguramente quiere desarrollar en su hijo, y la investigación es clara en cuanto a que una relación cercana, amorosa y estrecha entre padre e hijo ayudará a fortalecer la conciencia de un niño.
2. Relación y Resistencia a la Tentación
The study also found that emotionally secure children showed increased ability to resist temptation. [1]
¡Increíble! La habilidad para resistir la tentación se fortalece a través de la seguridad emocional. La fuerza para resistir la tentación es una parte valiosa y significativa del carácter moral y es facilitada por esa relación amorosa entre padres e hijos, en parte debido a la seguridad emocional desarrollada.
Y aunque la seguridad emocional por sí sola fortalece la resistencia a la tentación, hay otro aspecto de la relación que ayuda en esta cuestión. Nuestra verdadera fuerza para resistir la tentación proviene de Dios. Tener una relación viviente y una conexión con Dios nos permite el acceso constante a la fuerza necesaria para resistir la tentación, y cuando los niños tienen una relación fuerte con sus padres, aprenden por experiencia lo que es tener una relación con Dios. La relación obtenida por experiencia en la niñez forma la base de la relación que formarán con Dios.
3. La relación y el Impacto de la Conversación Moral
El estudio también reveló el efecto de la conversación entre padres e hijos. ¿Los niños escuchan y aplican las instrucciones de los padres? ¿Se les queda grabada? Bueno, eso depende de la calidad de la relación entre padres e hijos.
“La calidad de la relación entre padres e hijos es un importante moderador en cuanto al impacto del discurso entre padres e hijos sobre temas de la moralidad …una relación entre padres e hijos mutuamente receptiva y armoniosa, … contribuye a que el niño esté en disposición de adoptar los mensajes y valores de los padres». [1]
La descripción es un poco complicada, pero el concepto es maravillosamente sencillo. La calidad de relación de los padres con sus hijos es uno de los más significantes indicadores sobre el impacto que su instrucción tendrá en sus hijos.
Calidad baja en la relación padre- hijo = impacto bajo en la instrucción de los padres.
Calidad mediana en la relación padre-hijo = impacto mediano en la instrucción de los padres.
Calidad alta, fuerte, relación padre-hijo = impacto significativo y duradero en la instrucción de los padres.
Esto debería llamar la atención de todos los padres. Mamá, papá, ¿sienten que sus hijos no los escuchan? Intenten centrarse menos en las palabras y más en el tiempo que pasan juntos.
Relación y Salud Emocional
La investigación también deja claro que la relación y la seguridad emocional durante la niñez colocan una base vital para la salud emocional y el bienestar durante toda la vida adulta.
“No hay nada más importante en el mundo hoy en día que la crianza que reciben los niños en los primeros 3 años de vida, ya que es en estos primeros años donde se genera la capacidad de confianza, empatía y afecto. Si no se atienden las necesidades emocionales del niño durante estos años, daños permanentes pueden ser el resultado.” [2]
La Relación con los Padres es un Modelo de la Relación con Dios
Es posible que de todos los beneficios de la relación el más importante sea el papel de ayudar a los niños a desarrollar su propia relación personal con Dios. Lo cierto es que la clave para comprender la relación en la juventud y en la edad adulta se basa en gran medida en la relación obtenida por experiencia en la niñez. Aunque hay bastantes factores involucrados en la relación futura de una persona con el Señor, la experiencia sobre la relación durante la niñez es posiblemente la más importante.
«La calidad del vínculo entre el bebé y su madre tiene consecuencias significantes en las etapas futuras de la vida». [3]
Esta y otras investigaciones indican claramente que la calidad de las relaciones que una persona forma en la edad adulta -ya sea con sus amigos, su cónyuge o con Dios- está estrechamente ligada a la calidad de la relación que esa persona vivió con sus padres cuando era niño.
“Los corazones juveniles desean vivamente la simpatía y la ternura, y si no las obtienen de los padres, las buscarán en fuentes que pongan en peligro la mente y las costumbres.” – La Educación Cristiana, 147
Pasos para Construir la Seguridad Emocional
Esto es sólo una pequeña parte de una situación mucho más amplia sobre la función entre las relaciones y el desarrollo del carácter, pero debemos hablar de la parte más importante: hacerlo práctico. En este momento, es posible que te preguntes «¿Cómo?». ¿Cómo se construye la seguridad emocional durante la niñez? Afortunadamente, el proceso es sencillo.
1. Estar allí constantemente
El paso más importante para construir la seguridad emocional es simplemente estar ahí con su hijo. La relación requiere tiempo- tiempo completo, para ser exactos. Pasar tiempo con sus hijos, conviviendo y haciendo todo juntos, es maravillosamente sencillo, pero profundamente impactante para la seguridad emocional de un niño.
La relación no se puede enseñar – se obtiene a través de la experiencia vivida. No hay ninguna clase, plan de estudios o libro que desarrolle la seguridad emocional en su hijo. Se debe experimentar a través del tiempo que pasan CONTIGO.
Recuerda que tu trabajo es reproducir el carácter de Dios ante tus hijos. ¿Cuál es el verdadero carácter de Dios? Es un Dios que caminó con su creación en el jardín del Edén, un Dios que instruyó a su pueblo para que construyera un santuario para poder morar con ellos, un Dios que vino en carne para poder identificarse con nosotros, un Dios que espera el día en que el pecado será eliminado y volverá a morar cara a cara con su creación, y un Dios que dice: «Nunca te dejaré ni te abandonaré». Los padres que desean representar este carácter de Dios a sus hijos harán lo mismo. Siempre buscarán estar con sus hijos y ser el mejor amigo de sus hijos.
2. Respondiendo con consistencia
Otra clave para construir la seguridad emocional es la capacidad para responder con rapidez. Este es otro aspecto de la representación del carácter de Dios para el niño. El Señor dice: «Llámame y te responderé«. Esa es una promesa en la que podemos depender.
Para ser claros, una respuesta inmediata no significa una conversación inmediata, ni tampoco darle al niño exactamente lo que pide. Un abrazo o un suave apretón de manos pueden ser una respuesta inmediata tal como lo es la respuesta verbal, dependiendo de la situación. Sea lo que sea, el niño necesita saber que sus padres lo han escuchado y que sus necesidades serán atendidas. Recuerda que estás representando el carácter de Dios ante el niño. Aunque Dios no siempre nos concede una respuesta inmediata a nuestras oraciones, sabemos que El nos escucha y oye nuestra petición en el momento en que la pedimos, y nos responderá de una manera que sea mejor para nosotros. Un niño debe obtener a través de la experiencia, mientras es joven, la realidad de un padre que siempre le escucha y que tiene en mente su mejor interés. A medida que vayan experimentando esto, ellos aprenderán a confiar en la realidad de un Dios que responde a la oración.
3. Mostrar afecto físico
Y, por último, pero no menos importante, es el contacto físico, es de vital importancia para el desarrollo de la seguridad emocional. Los estudios demuestran que los niños que crecen en un ambiente con poco contacto físico o poca comunicación tienen el cerebro notablemente más pequeño que otros niños de su edad. Los abrazos, tomarse de la mano, acurrucarse y otros tipos de afecto físico son muy beneficiosos para el desarrollo del cerebro del niño.
La construcción de la seguridad emocional es profundamente importante, y a la vez sencilla y maravillosa. La verdadera educación – desarrollar un carácter apto para la eternidad – es pasar tiempo con sus hijos, y permitirles una experiencia de relación con el Señor a través de su relación con usted.
“Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes.” – Deuteronomio, 6:6-7
Para saber más sobre este tema puedes obtener la serie en DVD «Educando a una generación pensante». La sesión 6 se centra en el trabajo de desarrollo del carácter, y en el tema del desarrollo de la seguridad emocional.
Referencias:
- Mother-Child Discourse, Attachment Security, Shared Positive Affect, and Early Conscience Development. Child Development, Vol. 71, No. 5 (Sep.-Oct., 2000), pp. 1424-1440
- Dr Elliot Barker. The Critical Importance of Mothering
- Robert S. Feldman, Child Development, 176