¿Pensador o Reflector?
¿Alguna vez te has preguntado sobre el propósito de la educación? Aquí se establece claramente el propósito de la verdadera educación, en contraste con la falsa.
“Cada ser humano, creado a la imagen de Dios, está dotado de una facultad semejante a la del Creador: la individualidad, la facultad de pensar y hacer. Los hombres en quienes se desarrolla esta facultad son los que llevan responsabilidades, los que dirigen empresas, los que influyen sobre el carácter. La obra de la verdadera educación consiste en desarrollar esta facultad, en educar a los jóvenes para que sean pensadores, y no meros reflectores de los pensamientos de otros hombres.” – La Educación, 17
El verdadero propósito de la educación es crear a un pensador- cultivar el talento que le es dado a cada individuo por su Creador. Mientras que el falso plan de la educación es crear reflectores de los pensamientos de otros hombres, Dios diseña que cada uno de sus hijos sean verdaderos pensantes.
El quiere que ellos sean capaces de tomar decisiones y formulen creencias basadas en su palabra, en lugar de la opinión de los demás, y luego defender esas creencias como individuos, aunque los cielos se caigan.
Estos conceptos de la educación son elevados, amplios y profundos. Pueden parecer complicados. ¿Estas buscando un método sencillo para educar a tu hijo para que sea un pensador? ¿Estas confundido por todas las ideas contradictorias de la educación que existen y solo quieres saber que será lo mejor para tus pequeños? Puedes encontrar las respuestas a tus preguntas y mucha más información útil en nuestro blog y en nuestra serie de DVD, Educando a Una Generación Pensante
